Rellenos dérmicos

Los dentistas tienen experiencia y conocimiento de la zona bucofacial y de las inyecciones, con un amplio conocimiento de la dinámica de la expresión facial. También están designados como prescriptores, por lo que pueden y están legalmente autorizados a tener existencias y prescribir medicamentos con receta para fines cosméticos. Además, los consultorios dentales están regulados por la Comisión de Calidad de la Atención, lo que garantiza el cumplimiento de los más altos niveles de calidad y seguridad.

Tras una consulta exhaustiva para hablar de sus preocupaciones, el dentista recomendará qué zonas de la cara deben tratarse. Esta decisión se basará en conseguir un resultado con el que no sólo esté usted satisfecho, sino que también se adapte a su rostro.

Antes de administrar el relleno, se limpiará y desinfectará la piel y se marcarán las zonas a tratar. A continuación se inyectará el relleno de forma segura y eficaz.

A continuación, se le darán instrucciones posteriores al tratamiento para garantizar los mejores resultados.

Cada cita, dependiendo del tratamiento requerido, durará entre 20 y 40 minutos.

Los resultados iniciales son inmediatos y las mejoras son visibles en el transcurso de 7 a 14 días.

Cualquier efecto secundario posterior al tratamiento debería remitir en dos semanas. La mayoría de los pacientes no necesitan tiempo de inactividad tras el tratamiento y pueden volver al trabajo y a las actividades normales el mismo día. Las instrucciones posteriores al tratamiento se darán al final de la cita

Los rellenos dérmicos no son permanentes, y los resultados pueden durar entre 6 y 15 meses. El dentista analizará sus necesidades y le aconsejará un periodo entre tratamientos.

Dependiendo del paciente y de la zona tratada, es posible que se produzcan algunas molestias leves. Sin embargo, suele ser temporal, ya que la solución de relleno se inyecta de forma relativamente lenta y suave con una aguja muy fina. En la mayoría de los casos también se le ofrecerá un anestésico para que la experiencia sea más cómoda.

Los rellenos dérmicos suelen ser seguros si los realiza un profesional experimentado y debidamente cualificado. Como ocurre con cualquier tratamiento estético, existe el riesgo de que se produzcan reacciones adversas, aunque suelen ser bastante raras. Puede estar seguro de que sus tratamientos serán realizados por un profesional sanitario cualificado que sabrá cómo aconsejarle o tratarle mejor en caso de que se produzca una reacción adversa.

Sí, un amigo o familiar puede acudir a la cita con usted.